quarta-feira, novembro 23

Nascimento de um novo Hitler

Excerto de um artigo de Carlos Alberto Montaner:

(...)El presidente Ahmadinejad, con una desfachatez que debemos agradecerle, puesto que no deja la menor duda sobre cuáles son sus intenciones, ha declarado dos cosas que son para echarse a temblar. La primera es que ''Israel debe ser borrado del mapa''. La segunda es que ''el mundo debe darse cuenta de que Israel no es el único objetivo de Irán, sino, simplemente, el primero''. Algo que no ignoran los argentinos que en 1994 sufrieron un brutal atentado en pleno Buenos Aires, cuando los servicios iraníes destruyeron con una poderosa bomba el edificio de la Asociación Mutual Israelita (AMIA), y que sufren todos los días los habitantes de Israel, árabes y judíos, con los atentados perpetrados por los asesinos-suicidas financiados, entre otras capitales, desde Teherán.

El asunto es muy claro: ante nuestros azorados ojos, sin pausa ni tregua, uno de esos nefastos personajes de los que inevitablemente conducen a la humanidad al matadero va desplegando sus peores rasgos. Es un fanático convencido de que está destinado a cambiar la historia del mundo y tiene en su memoria colectiva la remota grandeza de Persia. Se siente víctima de no se sabe qué extraños agravios ancestrales. Posee y defiende una causa sagrada (el restablecimiento planetario de la supremacía del islam) y atesora los recursos para perseguir sus planes tozuda y violentamente. Lo único que le falta es un ridículo bigotillo de mosca bajo la nariz.

(...)Tampoco es difícil predecir el resultado final: Irán no logrará su objetivo final, pero la destrucción dejada por ese conflicto será infinitamente mayor que la provocada por la Segunda Guerra Mundial. Si a Churchill le hubieran hecho caso en el año 1935, cuando pidió detener a los nazis a cualquier costo, la humanidad se habría ahorrado sesenta millones de cadáveres y la mayor devastación causada por el hombre que recuerda la historia. Es la hora de releer sus discursos. Y, sobre todo, es la hora de actuar.

Sem comentários: